Guía a tu Escuela hacia la Sensibilidad Ambiental

Por Jeff Reading
Traducido por Sandra Rodriguez

Un ciudadano ambientalmente sensible – alguien con la capacidad para percibir, interpretar, y ejecutar acciones apropiadas para mejorar el estado de los sistemas naturales – es el objetivo final de la educación ambiental. La actual educación ambiental todavía no alcanza a lograr estos objetivos ya que no va más allá de ampliar en los estudiantes, el conocimiento de los sistemas naturales y la consciencia por los temas ambientales. Aunque esos también son objetivos importantes, nosotros sabemos que el conocimiento y consciencia por sí solos no necesariamente guían a la gente a cambiar su estilo de vida, su comportamiento, o a tomar acciones en temas ambientales. La educación para la sensibilidad ambiental debe también ayudar a los estudiantes a establecer contacto personal con los temas; debe incluir una modificación en el estilo de vida, y una fase de acción en donde los estudiantes apliquen conscientemente el nuevo conocimiento.

Guiar a una comunidad escolar hacia la sensibilidad ambiental no es difícil. Sin embargo requiere de un ligero, pero profundo, cambio en las estrategias de enseñanza, y requiere dedicación para un cambio a largo plazo. La siguiente es una visión general de un proceso de cinco pasos que ha sido empleado y mejorado por muchas escuelas en Calgary Alberta, durante los últimos diez años. El objetivo de este proceso es desarrollar un plan escolar de tres a cinco años orientado a profesores, estudiantes, y familiares para que se conviertan en individuos educados, preocupados, y capacitados, que entienden su impacto personal en la tierra y buscan activamente mantener o mejorar la salud del planeta.