Más allá de la huella ecológica: Cómo usar el proceso STEM
Por Cornelia Harris, Alan R. Berkowitz, Megan McLean y Kim Notin
Traducido por Sabrina Sánchez
¿Por qué las lecciones de temas medioambientales a menudo vienen con una porción llena de culpa? Una manera es a través de la utilización de una prueba de «huella ecológica» que demuestra a los estudiantes qué tan grande es su huella ecológica mediante plantear una serie de preguntas que indican cuántos recursos él o ella utiliza. Al estudiante se le presenta una calificación al final, por lo general representado en el «número de tierras» que tomaría si todos en el mundo viviéramos de la forma que lo hace él o ella.
¿Qué aprenden los estudiantes al realizar una actividad así? Incluso si respondes las preguntas como un «ángel» medioambiental, verás que es imposible reducir tu impacto a mucho menos que dos «tierras». Como es reconocido en muchos sitios que ofrecen pruebas de huella ecológica, una parte de tu impacto se debe al hecho de que, si vives en países como los Estados Unidos, tenemos una infraestructura y una economía que se basa primariamente en combustibles fósiles. Como consecuencia, los estudiantes a menudo se sienten frustrados e inseguros de qué hacer, dado que la situación se siente un poco imposible.
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